“Lo que distingue al hombre de los otros animales son las preocupaciones financieras.”  Jules Renard (1864-1910) Escritor y dramaturgo francés.

Como todo en esta vida, podemos diferenciar entre diferentes fases o periodos a lo largo de nuestra vida en las que existen una serie de parámetros comunes que se suelen cumplir. Todo este conjunto es lo que se puede denominar como ciclo de vida del ahorro.

En el siguiente gráfico te mostramos una serie de fases o periodos distinguidos en los que nuestra tasa de ahorro fluctuará debido a diferentes factores, tanto internos como externos.

Este ciclo se puede dividir en:

  • Explotando a los padres: etapa en la que somos dependientes económicamente de nuestros padres o contamos con ingresos, pero permanecemos en el hogar familiar. Nuestros gastos suelen orientarse fundamentalmente al ocio, o a la adquisición de un vehículo. En esta fase el ahorro debería representar un porcentaje elevado de nuestros ingresos, superior al 25-30%.
  • Creando un hogar: la independencia trae consigo una serie de gastos recurrentes (vivienda en alquiler o hipotecada, suministros, ocio). El ahorro en esta fase, posiblemente será menor, debido a la mayor cantidad de gastos. En torno a un 15-20% de los ingresos.
  • Formando una familia: el núcleo familiar crece, el gasto en pañales nos lleva a que la mecánica del ahorro sea complicada por la abundancia en gastos extraordinarios. Quizás esta fase sea la más complicada para ahorrar, fijándonos como objetivo en torno a un 5-10% de nuestros ingresos.
  • Explotado por los hijos: a medida que los retoños van creciendo, el dinero destinado a gastos comunes como estudios, ocio de los mismos u otros aumenta. Es el momento de intentar mantener ese ahorro del 5-10% de nuestros ingresos.
  • El nido se queda vacío: quizás representa el cambio más severo entre las fases. Momento en el cual nuestros hijos empiezan a gozar de independencia económica y tu gozarás de la misma manera de tranquilidad. Es momento de destinar en torno al 30-40% de nuestros ingresos al ahorro, ya que a su vez, suele coincidir con la época de mayor poder adquisitivo.
  • Disfrutando de la jubilación: llega el momento de disfrutar (viajar a Benidorm), de ver los frutos del colchón que hemos venido realizando durante las diferentes fases. En este punto nuestro dinero destinado al ahorro dependerá de lo misericordiosos que seamos con nuestros descendientes.

Cada uno de nosotros, dependiendo de numerosos factores, pasaremos por las distintas fases de este ciclo, ajustándonos en mayor o menor medida a las circunstancias individuales. Aunque es cierto que por los tiempos que nos ha tocado vivir, las primeras fases se han alargado en el tiempo (independencia, nacimiento de hijos). Dando lugar a que las fases en las que más ahorro se puede generar se hayan acortado en el tiempo.

Debemos recordar que todas las fases deben de tener un denominar común, el ahorro/inversión, de manera recurrente.

¿Se corresponde tu metodología de ahorro con la fase en la que te encuentras?

Si no es así, proponte el cambio. ¡Elige tu suerte!

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